Investigación e I+D
El PhD (“Doctor of Philosophy”), o doctorado, es el título académico universitario de mayor nivel, también denominado de “tercer ciclo”. En el Espacio Europeo de Educación Superior y en la mayoría de los países occidentales, requiere la superación previa del grado de Máster (segundo ciclo). El doctorado es el último y más importante grado académico que imparte una universidad u otra institución autorizada para ello. Quien obtiene este grado se llama doctor o doctora.
Un estudio realizado en los Estados Unidos sobre tres mil graduados de doctorado muestra que alrededor del 57 % de los doctores se quedan trabajando en el medio universitario, sobre el 38% en la industria y tejido empresarial, mientras solo el 5 % van a trabajar a la administración pública. Los doctores en la mayoría de los países desarrollados son los que poseen una mayor inserción y mayor salario, especialmente en las empresas que desarrollan investigación, desarrollo e innovación (I+D+i).
Un PhD es un título que te prepara para ser un profesional de la investigación (profesión de “investigador”), y por tanto merece la pena si tu objetivo profesional es investigar en un ámbito académico, en “think-tank”, o en el área de I+D+i de empresas. Aunque hay puestos de investigación que se pueden conseguir a través de programas de máster, si quieres llegar a los puestos más altos en investigación en tu campo de interés necesitarás un PhD.
Además de en la investigación, los PhDs son valorados en otras áreas profesionales como consultaría, empresas de ingeniería y tecnología, servicios financieros, ONGs, organizaciones culturales, etc. Tener estas alternativas es importante, dado que la investigación es un mercado limitado, especialmente para ser profesor de universidad.